El Municipio de Penonomé ha intensificado sus acciones para frenar el consumo descontrolado de licor en la vía pública, especialmente en los alrededores del mercado público, zona que constantemente genera quejas por la presencia de personas en estado de embriaguez y el mal aspecto que esto ocasiona.
Para atender esta problemática, las autoridades municipales asignaron a Fátima Flores como oficial de cumplimiento en el área. Desde su designación, se ha puesto en marcha un operativo que busca hacer cumplir las normas que prohíben este tipo de conductas. Las personas sorprendidas libando licor en espacios públicos están siendo sancionadas con multas. En caso de que no paguen la sanción económica, son trasladadas al Departamento de Ornato y Aseo, donde deben cumplir jornadas de trabajo comunitario, principalmente en tareas de limpieza.
Este operativo, que cuenta con el respaldo de la Policía Nacional, ha permitido detectar incluso a personas provenientes de otros distritos como La Pintada o El Valle de Antón, que permanecen en la zona del mercado en estado etílico, generando preocupación entre los comerciantes y transeúntes.
Flores ha indicado que la duración de los trabajos comunitarios varía dependiendo de la gravedad de la falta, oscilando entre dos y cinco días. En casos reincidentes, se aplican sanciones más rigurosas, incluyendo citaciones adicionales o labores más extensas.
Desde el Departamento de Ornato, Guillermo Guerrero explicó que además de estas medidas, también se enfrentan a otro problema serio: el abandono de desechos voluminosos como refrigeradoras, estufas, lavadoras y recipientes con aceite de motor. Según Guerrero, estas prácticas afectan la imagen del distrito, ya que muchas personas extraen solo las piezas metálicas y dejan el resto esparcido en las vías.
Tanto Flores como Guerrero coincidieron en que estas acciones buscan reforzar el orden y la buena imagen de los espacios públicos del distrito. La administración municipal ha reiterado que no se permitirá el irrespeto a las normas y que quienes insistan en estas conductas antisociales deberán enfrentar las consecuencias, ya sea en forma de sanciones económicas o de trabajo comunitario.
Finalmente, las autoridades hicieron un llamado a la ciudadanía a respetar los espacios compartidos y a colaborar en el mantenimiento de una ciudad más limpia y segura para todos.
