Con miras a encontrar el camino para impulsar una propuesta integral para la Igualdad de Género en la Participación Política, se dio una primera reunión de consulta que busca llegar a acuerdos y promover un paquete de reformas electorales que incluya la paridad entre mujeres y hombres en los procesos electorales en el país.

Durante el debate,  surgió la necesidad de revisar y proponer medidas que garanticen   la paridad política, protección de datos digitales, el uso de los financiamientos públicos en igualdad, fueron algunos de los temas tratados en esta primera reunión consultiva en la que participaron la Ministra de la Mujer Niurka Palacios, la Magistrada Suplente Yara Campos e Itziar González, representante residente adjunta del Programa de las Naciones Unidas para el Desarrollo (PNUD) en Panamá.

La ministra Palacio indicó que estas actividades son parte fundamental de las políticas públicas de igualdad de oportunidades establecidas en el Decreto Ejecutivo 2 del 5 de junio de 2024 «Que adopta la Política Pública de Igualdad de Oportunidades para las Mujeres 2024-2034». 

Agregó que con esta implementación se busca alcanzar una igualdad real y sustantiva en todos los ámbitos políticos, lo que iniciamos hoy aquí, continuará en el resto del país, porque se trata de consultar a las actoras claves, las propias mujeres que participaron a través de los partidos políticos y la libre postulación el pasado 5 de mayo.

Por sus parte la Magustrada Campos señaló que es de importancia que se implementen políticas y estrategias que aseguren la inclusión de las mujeres en los procesos electorales por ello el Tribunal Electoral ha  estado de puertas abiertas para atender estos y todos los temas.

Por su parte la Representante Residente Adjunta del PNUD resaltó el respaldo del organismo internacional en la búsqueda de acuerdos para alcanzar la igualdad de oportunidades para las mujeres.

Los datos estadísticos proporcionados por el Tribunal Electoral indican que en las pasadas elecciones de 2024 las mujeres representaron más de la mitad del Padrón Electoral, pero en contraste, representaron menos del 20% de candidatas principales a puestos de elección y apenas un 13% resultó electa, siendo además las principales víctimas de violencia política de género y de la falta de respaldo y recursos económicos.