Mejorar la calidad de vida de las privadas de libertad, es lo que busca la Defensoría del Pueblo en las cárceles públicas de Coclé, especialmente la de Llano Marín, así también garantizar programas que refuercen el bienestar psicológico de hombres en cárceles de la provincia y a nivel nacional.
Situaciones como el abandono familiar, disputas entre parejas, falta de acceso a la salud y falta de visitas conyugales, son algunos casos que la defensoría evalúa a través de su dirección nacional de privados de libertad.
Eduardo Leblanc, Defensor del Pueblo, dijo que han hecho recorridos en la cárcel de Aguadulce y en la cárcel de mujeres en Llano Marín de Penonomé, y que en espe4cialo para las mujeres existe un patrón a nivel nacional de desigualdad de género, siendo discriminadas.
Un ejemplo, es la falta de categorización de pabellones por delitos, con un aspecto cultural de abandono de hombres hacia las mujeres cuando estas son las recluidas, por lo que buscarían atenderlas especialistas en psicología para que esto no sea un factor determinante en la resocialización.
Leblanc dijo que no sólo en Coclé se está revisado el estatus actual de las privadas de libertad, sino en todo el país ya que no poseen cárceles estilo El Renacer, que brindan otro tipo de espacios de reformación a aquellas con delitos o comportamientos que no requieran una máxima seguridad, por lo que se encuentran conversando con el Ministerio de Gobierno para determinar qué se puede hacer.