EDILSA GONZÁLEZ ROCA
Un panorama muy crítico en materia económica se prevé para el país producto de la crisis generada a raíz de la aprobación del Contrato Ley 406 y su rechazo generalizado, que ha llevado a la paralización del país con su consecuente pérdidas económicas, estimó el economista y analista laboral René Quevedo, durante su participación en el Programa Opinión Pública de Radio Mi Favorita.
Según Quevedo la actual crisis del país dejará como saldo la pérdida de unos 50 mil empleos, afectando principalmente a los agricultores y comerciantes que son los que mayormente se han visto perjudicados por los constantes cierres de vías a nivel nacional.
Indicó que para este lunes 20 de noviembre, a un mes de la aprobación de este contrato y el inicio de las protestas hay unas cien empresas solicitando al Ministerio de Trabajo reducción de personal, aparte del anuncio de los centros comerciales que cerca de 15 mil vacantes que se llenan en el último mes del año que ya no se van a dar.
Indicó que hay dos particularidades de esta crisis, la primera que ocurre en el periodo del año en donde se genera la mayoría de las ventas en el comercio y las 2/3 partes de trabajadores en el comercio son informales o microempresarios y por otro lado a diferencia de la pandemia el sector agro está siendo duramente golpeado en este momento y estos son dos sectores que más empleos generan.
Quevedo también se refirió al peligro de que Panamá pierda su grado de inversión y se siga perdiendo la confianza en el país ya que la mayor inversión que se ha hecho en el país en los últimos años ha estado en la inversión extranjera y toda esta situación es muy riesgosa, sobre todo cuando aquí decidir si se continúa con las inversiones extranjeras le toma dos años al gobierno decidir como lo fue el caso de la minería.
El economista calificó preocupante la falta de una decisión o acción por parte del gobierno ante la crisis que vive el país, puesto que esto daña aún más la confianza de los inversores y la forma como nos ven desde afuera como un potencial para invertir.
Aseguró que si la minería cierra, en el país no existe ninguna otra actividad económica que a corto plazo, genere un ingreso del 5% al Producto Interno Bruto, impuestos por el orden de los 375 millones al Estado y aportes a la Caja de Seguro Social, que también va a sufrir las consecuencias de esta situación al perderse tantos empleos formales e incrementarse la informalidad.
